Datos personales

martes, 27 de enero de 2015

EL HOTEL VÁSQUEZ

Los fines de semana unos cuantos miembros del grupo nos reuníamos en las noches para asistir a fiestas en el sector Altavista , pero dada la “interzonalidad”, al terminar las fiestas a horas de la madrugada, nos era muy difícil retirarnos a nuestras casas, y como solución Alberto nos permitía que fuéramos a dormir a su casa. Pero no siempre Alberto asistía con nosotros a esas fiestas, entonces, en estos casos terminábamos por ser ingeniosos para llamarlo y que nos abriera la puerta. En algunos casos nos encaramábamos por una reja en la ventana de la sala principal, creyendo que sus padres no se darían cuenta. El problema era que al levantarnos en la mañana y querer irnos no deseábamos que se dieran cuenta que habíamos pasado la noche allí. Pero la madre de Alberto que “se las sabía todas más dos” nos estaba esperando para darnos un regaño por montarnos por la reja y para darnos una taza de humeante café.

No hay comentarios:

Publicar un comentario